Tenía el alma llena de espacios vacíos, sin colocar mis sentimientos, sin haber vivido deseos, sin haber hecho realidad ninguno de ellos.
Cada día esperaba la noche con ansiedad, después deje la noche y pensé que también podría verte a cualquier hora, mi mente se volvió fuego, y mis manos te buscaron junto al sol de medio día sin encontrarte, el sol se marcho dejando entrar la tarde gris de la tormenta,
Después imagine tus labios cerca, diciendo te quiero, tan imposible como ver un volcán al lado de mi casa, abriéndose paso entre la gente de lava, y yo buscándote en los misterios de la noche que no llega.
Mi querida Lola, mi amiga poetisa que dice que ella no escribe versos pero que derrocha más poesía que el poema con mejor métrica, no cambies nunca.
ResponderEliminarBesos
Como siempre amiga me gusta lo que escribes,letras llenas de calidez y de sentimientos...Un placer leerte.
ResponderEliminarFeliz dia!!
Besotes.
Esos espacios vacíos inspiran un precioso poema.
ResponderEliminarun abrazo.
Hola María, muchas gracias por todos tus comentarios amables que haces de mis escritos, me siento muy alagada. Un beso.
ResponderEliminarHola Ana, me alegro mucho de verte y de tus comentarios siempre amables. Un abrazo.
ResponderEliminarLos espacios vacíos tú los llenas con bellos poemas, Lola.
ResponderEliminarBesos.
Llamas son tus letras, fuego tu corazón.
ResponderEliminarBesos.
Mercedes.
Hola Ricardo, claro que los espacios vacíos se llenan con cariño. Gracias por tu comentario. Un abrazo.
ResponderEliminarHola Antony, muchas gracias por tu hermoso comentario. Un abrazo.
ResponderEliminarHola Mercedes, cuantas palabras bonitas para una persona sencilla como yo que no se las merece. Muchas gracias. Un beso.
ResponderEliminarsiempre hay que dejar algo de hueco para más. Hermoso poema, un abrazo
ResponderEliminarGracias Ismael por tu comentario. Un abrazo.
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