viernes, 6 de mayo de 2016

OCHO




OCHO

Recuerdo el día que me contaron que el ocho era un número infinito, que no se terminaba su trazo, y que siempre se enlazaba en su cintura.


No supe entender ese mensaje, y hable con las personas que tenían el ocho como número mágico y preferente, decían que les traía suerte, y que su pasión se multiplicaba siempre.


Yo no creía nada mas, pero después supe que no ponían horario a su amor, que todo estaba bien en su forma de amar, pero las personas se cansan de amar, y nadie puede dar tanto amor... sin ser correspondidas.


Pero a veces  su número de la suerte falla, el amor se  marcha, y llega la noche a sus días, por que el sol les hace daño.


Nadie ama o deja de amar así, por mucho que te acompañe el mágico  ocho... las cosas si han sido no se terminan de un día para otro, al menos que jamás haya existido, y solo el engaño fuera autentico. 




9 comentarios:

  1. Así es, no hay números de la suerte, la suerte es que la vida te regale el amor para siempre, con sus más y sus menos, con rosas y espinas, pero juntos hasta que uno de los dos, le llegue la hora...
    Muy bonito tu relato, me gusta mucho como lo dices.
    Un beso Lola y buen finde.

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  2. En tu caso el ocho sigue ahí.
    Como si fuera el primer día.
    Y ahí seguirá.

    Besos.

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  3. A pesar de que la suma de los números de mi fecha de nacimiento es 8 no lo tengo cómo número de la suerte......Si que tengo un número favorito pero tampoco trae suerte:-)
    Besicos

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  4. PUES TU POST HA SIDO UNA ENSEÑANZA PARA MÍ.
    ABRAZOS

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  5. El mejor número es el destino que nos ponga por número.

    Un placer leerte.

    Un beso bien grande.

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  6. Muy bueno ese ocho, pero tampoco es mí numero de la suerte. Besitos.

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  7. Hola Lo la, no sé si catalogar el 8 como mi número de la suerte, pero motivos tengo para ponerle esa etiqueta.buen poema para reflexionar.
    Te mando un fuerta abrazo Lola,
    Feliz comienzo de semana.

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  8. Nunca consideré al ocho como un número de la suerte. Es demasiado predecible.
    Besos

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