No hubo reproches, solo indiferencia que es el peor de ellos.
No hubo palabras, solo soledad, deseos impregnando mi piel de él sin estar, sabiendo que ya deja todo en otra piel, por no recordarme, por no ser esclavo como yo lo soy.
No hubo noches con el, pero si sueños diarios, cuentos donde el príncipe llegaba con su sonrisa bella y sus ojos enormes pidiendo perdón sin hablar, porque todo lo que quedo fueron sus silencios, sus ausencias, y sus cartas escritas cada noche junto a la luna.
Lola, tus letras nos invitan a recordar y a guardar los buenos momentos vividos...El amor se compone de mil sensaciones y sentimientos, pero lo cierto es que, siempre nos deja huella y se renueva constantemente...Gracias por tus letras y tu cercanía entrañable, amiga.
ResponderEliminarMi abrazo y feliz fin de semana.
Muy bonito Lola. Un beso.
ResponderEliminarMe alegra verte de nuevo por aquí ya que hacía tiempo que no actualizabas.......y hoy lo has hecho con un bonito escrito.Besicos
ResponderEliminarHola Lo la, encantada de nuevo al leerte,este poema me trae buenos recuerdos, es siempre un placer leerte. Me imagino que ya estas en el mar, a mi ya me queda poquito, se me está haciendo pesada la epera, estos calores son insoportables.
ResponderEliminarTe mando un gran abrazo, querida amiga Lola.
Siempre llenas de sentimientos el momento en el que leo tus letras.
ResponderEliminarUn placer leerte.
Mi abrazo.
Hace más lo que queda que lo que se va. La huella del sentimiento es demasiado profunda.
ResponderEliminarFeliz día
Besos
Lola, a través de tus letras sabemos o al menos imaginamos tus sentires mas profundos, precioso de verdad, triste, pero hermoso, felicito esos sentimientos.
ResponderEliminarGracias por no olvidarme Lola y cuando quieras y del tiempo que dispongas aquí estaremos a tu ladito bella muakkkkk :*
UN ANHELO MUY TRISTE.
ResponderEliminarABRAZOS
Desde luego una pasada,,,espero que estés bien,,te mando un saludo desde una ventana de los urrutias.....
ResponderEliminarTienes tanta razón
ResponderEliminarel odio es amor
la indiferencia hacia el otro es el problema
un abrazo enorme