Tenia el cuerpo dormido en el ayer, y al igual que un cuento terminado, ya no esperaba nada, y descansaba en los atardeceres, viendo como se alejaban, sin recordar que ellos podían vivirse a tope, y esperar que saliera de nuevo el sol.
Había vivido tantas sombras, que se olvido de la luna en las noches de pasión que había vivido antes, que se convirtió en un ser triste y casi siempre enojado, sin darse cuenta que tenia una vida regalada, y un corazón inquieto, viviendo y durmiendo a su lado.
Y dejo que un día se acercara un ciclón a su vida que la dejo sin aliento, y sus noches llenas de sol y música, se dio cuenta que cada amanecer era mágico, y cada día una aventura, que no había que olvidarse de vivirla.
Volvió una y mil veces a soñar con el sol, su cielo se llenaba de estrellas cada noche, y volvió a tener sueños de colores, y camisones tirados con prisas en mitad de una noche que siempre parecía que seria eterna.
Después de un tiempo, el sol se marcho de su vida, de vez en cuando aparecía un triste y solitario rayo, que la hacia creer que se quedaría para siempre, pero eso ya nunca paso, y los días se convirtieron en septiembre, con su melancolía de otros años vividos, y su querer recordar constante.
cada amanecer era mágico, y cada día una aventura, que no había que olvidarse de vivirla.
ResponderEliminarAsi ha ser amiga...Precioso el mensaje...
Besos.
AUSHHH, SUS LETRAS DUELEN.
ResponderEliminarBESOS
Preciosooooooooo!!! siempre hay que estar dispuesta a vivir la aventura de vivir!!! Un abrazo inmenso cariñito!!
ResponderEliminarMe muevo en un mundo sin alma y sin embargo, qué quieres, sigo siendo un romántico. He disfrutado leyéndote.
ResponderEliminarUn saludo.
Esa foto me suena,,esa foto me suena..un beso Lola...gracias...
ResponderEliminarHola Ana, como me gusta que te haya quedado esa frase de mi escrito, hay veces que resulta difícil que algo sobresalga. Gracias amiga. Un beso.
ResponderEliminarHola Reltih, mejor que no duela nada, y menos aun mis letras. Gracias por tu comentario. Un abrazo.
ResponderEliminarHola siksika claro amiga, siempre hay que estar dispuesta a vivir aventuras, aunque ya estamos para pocas. Gracias por tu comentario. Un beso.
ResponderEliminarHola John Hall, se bienvenido a mi pequeño espacio de “sinsentidos” me alegra mucho verte aquí. Espero tu vuelta. Gracias por tu bonito comentario. Un abrazo.
ResponderEliminarHola amigo alp, claro que te suena la foto, los dos podemos ver esta isla aunque en lados diferentes. He estado un poco ocupada unos días… a si es que gracias por tu comentario y mas… un abrazo.
ResponderEliminarjooooo lola lagrimitas esta entrada me calo el sentir cielo te cuento que me sentí como si tus letras fueran mi recuerdo de muchos atardeceres que pensé en lo que deje marchan a un queriendo un beso lola querida
ResponderEliminarQUÉ BONITO ESCRIBES LOLA...!
ResponderEliminarA mi también me gustan los atardeceres,me provocan infinidad de sentimientos,siento que nos hablan,nos dejan abrazos y mensajes.
Mi felicitación y mi abrazo siempre,amiga.
M.Jesús